Los retos para el control de los riesgos en radiología llegan a su fin justo al acabar el año 2019. Hace unas semanas que disponemos un gestor de actividad ligado a las máquinas, que pone en evidencia la variabilidad de protocolos que usamos para un mismo servicio. La estandarización de procesos es un requisito para garantizar la seguridad y calidad de los servicios médicos.

Gestión de los datos

Como os decía, las nuevas herramientas de gestión permiten obtener información de los datos que se almacenan en los escáneres, resonancias y demás equipos del servicio de radiología. Una de las informaciones que podemos obtener es la actividad de cada equipo y el uso de un cierto protocolo de adquisición de imagen u otro. La gestión de los datos propiciará cambios importantes en todos los servicios de radiología.
En los estudios de resonancia existe una gran variabilidad de secuencias para obtener las imágenes con distintas características. Esta particularidad es la que hace que esta técnica sea tan rica en información, pero a su vez puede dar lugar a un caos de protocolos utilizados.
Por otro lado, las técnicas como el escáner con uso de radiación, deben ser utilizadas en base al criterio ALARA para que la dosis de radiación sea la mínima para obtener la información deseada de esa imagen.
En un gran servicio o un grupo de centros nos encontramos con una gran variabilidad de técnicos y radiólogos que pueden ir modulando los protocolos de imagen que aplicamos en las distintas máquinas. De esta forma, podemos llegar a tener una combinación infinita de variables que rompa con la deseada estandarización de procedimientos. No se si tenéis esa experiencia, pero a veces reconoces al técnico que ha obtenido las imágenes solamente viendo el protocolo de estudio que se ha utilizado.

Ventajas de protocolos estandarizados

Una de las ventajas del método científico es la reproducibilidad de los procesos y, aunque en medicina nunca hay un paciente igual que otro, debemos orientar nuestro trabajo hacia una estandarización de protocolos que asegure la calidad de nuestros servicios.
La estandarización de los protocolos permite indudables ventajas, como son:

  • Asegurar que cualquier paciente con una misma clínica recibe el mismo protocolo de estudio.
  • Optimizar la dosis de radiación de los pacientes en todos los escáneres.
  • Mantener y mejorar la calidad de imagen.
  • Ayudar al radiólogo a estandarizar el proceso de lectura de imágenes y confección del informe.
  • Asegurar la adherencia a los protocolos de imagen por parte de todos los técnicos.

La radiología basada en valor requiere la obtención de imágenes de alta calidad y coste aceptable, adaptadas a cada equipo, además de ser capaces de monitorizar esos estándares de calidad.

El reto nº 12

El reto es tener un programa de estandarización de protocolos definidos por los radiólogos de cada subespecialidad y los técnicos, crear una base de protocolos clínicos ligados a protocolos de adquisición de cada máquina con acceso a todos los usuarios con versiones actualizadas periódicamente.
En definitiva, que usemos un solo protocolo para una misma exploración independientemente del técnico que obtenga las imágenes o del radiólogo que informe ese estudio. Protocolo solo debemos tener uno por exploración y equipo.
La obligación de cada usuario es usarlos y no hacer cambios sin un consenso del responsable del servicio.
Si en tu servicio no hay una librería de protocolos, promociona a usarlo con tus compañeros. ¿Te sumas?

Fin de los retos

Hasta aquí los retos propuestos para el control de riesgos en radiología para el 2019. Estos pretenden abarcar un cierto abanico de los riesgos que concurren con más frecuencia en el servicio de radiología. Seguramente hay muchos más temas que abordar. He dejado para el 2020 el control de la dosis de radiación, un tema principal con novedades, que requiere un espacio mayor, en relación a la transposición reciente de la directiva EUROATOM.

Resumen de los retos  propuestos para aumentar la seguridad de los pacientes en el servicio de radiología:

  1. Verifica el nombre del paciente y la prueba a realizar.
  2. Conoce las reacciones adversas a los contrastes y su posible tratamiento.
  3. Traslada toda la información relevante en el cambio de turno. ¡Por escrito mejor!
  4. Respeto, no más interrupciones en el momento del informe del radiólogo.
  5. Por una radiología sin caídas accidentales.
  6. Detectar y comunicar hallazgos inesperados 
  7. Cada imagen en su archivo.
  8. El lavado de manos en radiología.
  9. Cuídate, cuídalos.
  10. Seguridad en la sala de resonancia magnética: formación!
  11. Radiología solución y no problema.

¡Hoy vuelvo a pedirte que si te ha parecido interesante, compartas este post! ¿Me ayudas?
Por un servicio de radiología más seguro para pacientes y profesionales.
¡Te deseo un feliz reto y feliz año nuevo 2020!
Pilar Manchón
Referencias Bibliográficas

  1. Implementing Standardized Protocols During Geographic Radiology Expansion

Megan Kalambo, MD, Jay R. Parikh, MD

  1. Implementing Shared, Standardized Imaging Protocols to Improve Cross-Enterprise Workflow and Quality

Venkataraman, V., Browning, T., Pedrosa, I. et al. J Digit Imaging (2019) 32: 880. https://doi.org/10.1007/s10278-019-00185-4

  1. Standardized Imaging Protocols – The Next Step For Providers Seeking Consistency, Added Value